En México, el marco legal de las herencias se rige principalmente por el Código Civil Federal y los códigos civiles estatales, ya que el derecho civil es competencia de los estados. Aunque puede haber variaciones menores entre los códigos civiles estatales, los principios generales y las reglas para las herencias son bastante similares en todo el país.
Cuando una persona fallece y deja un patrimonio (bienes, propiedades, dinero, etc.), es recomendable recibir asesoramiento legal de un abogado especializado en sucesiones y herencias, ya que puede asesorar a los herederos y beneficiarios sobre los pasos a seguir, los derechos y obligaciones de cada uno y los impuestos que puedan aplicar a la herencia.
Es recomendable la elaboración de un testamento y el abogado puede ayudar al testador (la persona que hace el testamento) a redactar y formalizar su testamento de acuerdo con las leyes y normas vigentes para garantizar que las disposiciones testamentarias sean válidas y claras.
En caso de que no exista un testamento o cuando surjan conflictos entre los herederos o con terceros, el abogado puede gestionar el proceso sucesorio ante las autoridades judiciales para que se declare la distribución de los bienes y derechos hereditarios de manera legal y justa.
Si existen bienes inmuebles o propiedades que deben ser divididos entre los herederos, el abogado puede intervenir en la partición, asegurándose de que se realice de acuerdo con la voluntad del testador y/o las disposiciones legales correspondientes.
En caso de disputas o conflictos entre los herederos, el abogado puede mediar y buscar soluciones legales para evitar que el proceso sucesorio se vuelva complicado y prolongado, como en algunos casos ha sucedido por más de 10 años.
El abogado también puede asesorar sobre los impuestos que deben pagarse en relación con la herencia, como el Impuesto sobre la Renta (ISR) y el Impuesto sobre Adquisición de Bienes Inmuebles (ISAI), y asegurarse de que se cumplan con las obligaciones fiscales correspondientes.
Es importante que, en situaciones de herencias, los herederos cuenten con un abogado especializado para garantizar que todos los procedimientos se realicen adecuadamente, se protejan sus derechos y se eviten problemas legales futuros. La función del abogado es asegurar que el proceso de sucesión se lleve a cabo de manera legal, transparente y justa para todas las partes involucradas.